HARRY COOPER:
“Mira Mickey.” [risas] Es un choque emocional. Es una pintura impactante.
NARRATOR:
Cuando Roy Lichtenstein expuso esta obra por primera vez en 1961, algunos se preguntaban si era el peor artista de los Estados Unidos. La fuente de la imagen es un libro para niños protagonizado por dos caricaturas de Disney. Nadie había hecho esto nunca: elevar iconos de la cultura pop al estatus de ‘arte’ de manera tan descarada.
HARRY COOPER:
Parece una especie de copia, algún tipo de reproducción barata.
NARRATOR:
Lichtenstein está desarrollando aquí su técnica distintiva. ¿Puede ver los pequeños puntos en los ojos de Donald y en el rostro de Mickey? Harry Cooper, curador y director de arte moderno.
HARRY COOPER:
Ese era el intento de Lichtenstein de imitar la trama de puntos (o “puntos Benday”) característica de las reproducciones comerciales a color de poca calidad. Si observa con atención una imagen de un periódico o en las tiras cómicas, verá que los colores y los tonos blancos y negros están creados por medio de este sistema.
NARRATOR:
Roy Lichtenstein explica por qué aquello le parecía importante.
ARCHIVAL, ROY LICHTENSTEIN:
Lo que me interesa es examinar los procesos de impresión, las formas en que se reproducen y divulgan las cosas, y el uso de puntos es una de las técnicas principales de impresión. La simplicidad… agrandar esos puntos de manera tal que el espectador pueda verlos con claridad.
HARRY COOPER:
Sabemos que tomó un cepillo para perros de cerdas duras, lo mojó en pintura y la aplicó a esas áreas para crear los puntos. Luego, con el tiempo, desarrolló formas mucho mejores para reproducir estos puntos, pero aquí es donde comenzó todo. Y, en muchos sentidos, es donde Lichtenstein comenzó a fundar lo que terminaríamos por llamar arte pop.